Por: Penélope Mujica (@penicornio)
Recuerdo la primera vez que fui a Fashion Week México, era nueva en la ciudad y apenas había conseguido mi primer trabajo en moda, este era como redactora de un blog 100% irrelevante, pero que tenía el poder de acercarme a ese mundo al que ansiaba pertenecer. La semana de la moda aún se celebraba en la carpa de Santa Fe, y aunque la emoción por asistir era grande, esta paulatinamente fue cediendo ante la desorganización y los errores del evento.
Siempre he pensado que este país tiene todo lo necesario para tener una industria fuerte y propositiva, y aún lo pienso, sin embargo esas primeras incursiones me dejaron con una sensación de vacío, y comencé a pensar que  quizás no estaba buscando en el lugar correcto –aunque este era el más obvio–. No me mal interpreten, en el país sobra talento, existen diseñadores, maquillistas, modelos, fotógrafos, etc, que hacen un trabajo impresionante y que nutren el medio con propuestas vanguardistas e interesantes, rompen barreras en vez de salvaguardar los esquemas que han sido impuestos sobre la moda latinoamericana y a la final del día impulsan el estándar más alto.
Este año, los desfiles se volvieron más interesantes, ya quedó atrás la monotonía de ver a todos los diseñadores en un solo lugar. Desde la presentación de Gypsy Sport en la cocina del Sheraton, hasta Kris Goyri en el hermoso Ex Convento de San Hipólito, los asistentes tuvieron la opción de cambiar de ambiente entre días, un pequeño detalle que indudablemente subió las apuestas para la moda nacional. La semana pasada México inundó los motores de búsqueda con sus propuestas para primavera, Vogue y W Mag, entre otros, hicieron artículos que se sintieron más involucrados con la escena local.
Esta evolución de la industria no solo se apreció en las locaciones y la comunicación, las colecciones presentadas en las pasarelas trajeron consigo una muy necesaria carga de energía a la Ciudad de México. Entre todas las colecciones presentadas vimos muchas propuestas dignas de mencionar.
Mancandy
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El estilo oversized y las combinaciones entre prints, lentejuelas, tonalidades fuertes, transparencias y siluetas desafiantes, mostradas en la pasarela hacen de esta colección un must para la próxima temporada. Como siempre Mancandy no pretende complacer a sus seguidores, sino trabaja para desafiar nuestra zona de confort e invitarnos a un mundo moderno e irreverente.
Vero Díaz
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La combinación entre las texturas y la reminicencia romántica de esta colección la hace no solo relevante creativamente sino también en términos de usabilidad. Esta muestra para primavera/verano 2017 es algo que muchas optarán por llevar.
Sanchez-Kane
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Interesante, atrevida, vanguardista y divertida son algunos adjetivos que usaría para describir esta propuesta, es muy grato ver a diseñadores latinos que se salen de su zona de comfort y experimentan logrando acabados de gran calidad.

It’s always fashion week: México SS17